Mi vida pato-logica
Sole me inspiró. Me recordó la mejor canción de Plaza Sésamo.
Decidí que no quiero seguir siendo una sardina. De acá en adelante terminaré todas mis plegarias con un "y por favor, por favor, vos que sos tan grande (como Maradona, ché), dejame amanecer como pato de bañera y no como una vil sardina, que por todo lo demás, fuera de ser albina no tiene nada de especial.
No sé en qué momento tuve esta epifanía, esta revelación, estilo el cuadro que tiene la abuela de la Anunciación, donde se abren los cielos y un rayito pega justo sobre la cabeza de la Virgen. No es muy a menudo que uno está fijándose hacia arriba, a ver si lo iluminan, y menos en época de invierno.
Si recuerdan al pato de hule de Enrique (alias el patito juguetón--¿ven que bien pinta?), tenía una mirada tan complaciente ese pato, era un pato en paz con su entorno, un pato simple y llanamente feliz. No se sentaba a pensar si estar en la bañera era lo que quería, si habrá una bañera más grande, más bonita, más limpia, si ese agua realmente era limpia, si le gustaba el jabón que había comprado Beto (porque seamos sinceros, en esa relación el que hacía las compras era Beto)...
Claro, como dice el gato buzo anónimo, podría tocarme ser el pato de una gorda y morir aplastado contra uno de los sucios costados de la bañera, pero en realidad aún ahora podría morir aplastada por una gorda, no hay seguro contra gordas. En Monopolio nunca salió una tarjeta que decía "Pase por Go y recoja su seguro contra gordas". Perdón si ofendo a alguien con lo de gorda, el comentario original no fue mío, solo estoy narrando los hechos.
Por lo demás, sería el pato de alguien que lo ama, flotando pacíficamente en el agua jabonosa caliente... de pis de mocoso, probablemente, pero en fin, caliente. Hmm, a menos que, como en Toy Story, sea desechado por un pato que en vez de hacer mero "cuac" cuando lo apachurran, diga "To infinity, and beyond!" Maldita sea, estoy frita. Tendría que partirme el trasero (literalmente, porque ahí tengo el pito) haciendo "cuac cuac" para complacer al mocoso miserable ese, el que se tira pedos en la tina para ver las burbujas. Eso o terminar en el basurero. Al menos como sardina no me veo en la obligación de complacer a nadie como método de supervivencia. Si me comen, no hay resentimientos, es el orden natural de las cosas. Si enjacho feo al don de otra sardina, me meto en un miche tipo "Beat It" de Michael Jackson, dos sardinas una frente a la otra con cuchilla en una mano y la otra amarrada a la espalda. Bueno, aleta, ustedes entendieron. ¿Pero tener que caer bien para sobrevivir? Diay, para esa gracia trabajar en un Ministerio.
De vuelta a ser sardina. En verdad que el charco de la par siempre se ve más azul.