Cat Chow Deli Mix, o la comida del diablo
Hace una semana Goshira (ese es su nombre cuando estamos practicando Turco Moderno para Extranjeros 4) se quedó sin comida. Usualmente come Iams pero nos desfinanciamos al comprar el auto, por lo que buscamos sustitutos en el supermercado.
Iams me gustaba mucho porque olía tan bien que, en una hambruna, definitivamente hubiera comido Iams sin problema. Además es muy humedita. Una amiga que prácticamente tiene su propio albergue y es bastante conocedora de la vida gatuna me dijo que darles un buen alimento les mantiene las defensas altas y son menos las visitas al veterinario. Sin embargo, a 11,700 la bolsa de 3 kg., pues Goshira iba a tener que hacer sacrificios junto con su mamá.
La gata de oficina que tenemos solo come Alley Cat, así que fue el primer sustituto en el que pensé. Llegué al super y encontré que era la más barata re-barata, a 2000 Colones más o menos la bolsa de 1.5 kg. Me sentí muy mal en comprarle lo más barato a mi única hija, así que opté por la segunda más barata: Cat Chow Deli Mix. Sí, Deli Mix se jacta de tener las cuatro carnes: pollo, pescado, res y pavo. Además tiene un centro de otro color que me parece muy coqueto y, bueno, dicen que la comida entra por lo ojos, ¿verdad?
Salimos Cat Chow y yo del super apenas a tiempo para llenarle el tazón a la famosa gata. Ella se lo comió sin mayor reparo, pues si bien ella es mi princesita, bien sabe que es una vil gata callejera nacida en cuna de oro (con recorte presupuestario temporal).
El problema vino al par de días. Les habré contado en algún momento de la gemela malvada. En realidad no es malvada, pero creo que todo gato debe tener un némesis así que decidí que, ante la desaparición de la negra abusadora, tenía que ser Gondia el reemplazo. Gondia es una versión más peluda y colorida de Goshira. Su hermana Chuta ya ha figurado en este blog como una de las co-conspiradoras contra la misteriosamente desaparecida gata negra (esa si era malvada). En todo caso, el asunto es que una noche llamé a mi gata y ella procedió a entrar puntualmente a la casa, como acostumbra. Al cerrar la puerta con los siete candados, pestillos y llavines, de repente notamos Shira y yo que se oía algo comiéndose su comida. Chángalas, como diría mi amiga Sofía. Una rata, dije yo. Mínimo un ratón, porque Shira las trae con frecuencia enteritas, solo para que le hagan compañía. No, era Gondia. Se armó un pleito de pelusas en esa casa y Shira espantó a Gondia hasta la sala, donde la última se postró en una silla con sus uñas bien clavadas. Pensé unos dos minutos en cómo sacarla hasta que se me ocurrió simplemente abrir la puerta (no soy el bombillo más brillante de la lámpara).
Anoche fue Chuta la que quedó atrapada en casa. Esta mañana estaban las dos paradas en la puerta, cual guardas de banco. Cual estatuas leoninas de casa vieja. No, no, cual Argonaths (esto es un freebie para los geeks). Simplemente las chavalas no se van.
Solo me queda concluir que Cat Chow Deli Mix es la comida del diablo. Es tan tentadora que los gatos no pueden alejarse, simplemente hacen cualquier cosa. Es la heroína de los gatitos. Kitty smack. Encima de todo, si hago la mate, me va a costar el doble alimentar a tres gatos con comida de la barata.
8 bolsas de Cat Chow de 1.5 kg. en dos meses: 21,600.
1 bolsa de Iams de 3 kg. cada dos meses: 11,700.
Tener dos gatos poseidos acamapando en la puerta de la casa: No tiene precio.